viernes, 27 de marzo de 2009

Casa no es museo.



Y apenas llegando a Caracas tuve que alistar todo para formar parte de la primera edición de Invasiones: Ciclo de performance en casas. Les cuento la iniciativa por encimita: Aidana Rico e Ignacio Pérez, artistas de la performance y creadores de Performancelogía, decidieron hacer de nuestra ciudad un mejor lugar para sus habitantes y para los artistas, y ya que los espacios oficiales de arte se quedan cortos a la hora de propiciar el encuentro, ellos mismos crearon una dinámica que permitiera la realización periódica de performance, su género predilecto, en un ambiente cercano al caraqueño. ¿Y qué mas accesible a uno mismo que su propia casa? Es así cómo nace esta iniciativa "de arte a domicilio", donde una vez al mes algún colaborador ofrece su hogar para que artistas de la performance (seleccionados por el mismo anfitrión) hagan esas cosas que hasta a los galeristas les da miedo que hagan.

En ésta edición, tuve el placer de compartir espacios con Érika Ordosgoitti, Yosmaira Silva y José Leonardo Guaglianone, jóvenes artistas cuyo trabajo admiro y respeto, por lo cual, me siento honrrado de haber conformado la alineación que abre esta interesante serie, y que, con el empuje de todos nosotros, se establecerá en la vida cultural de nuestra ciudad capital.



Para satisfacer la curiosidad, les cuento que la acción consistió en hacer arepas frente al público, acompañándola de la salsa preferida de los venezolanos, la guasacaca. Con ésta, se escribió sobre las arepas "La Poesía se come". El resultado se entregó a los invitados al final de la velada para su consumo. Se realizó mientras las otras performances seguían su curso. La intención era generar una dinámica donde los asistentes, en su mayoría desconocedores de la performance, percibieran esta disciplina de manera accesible, es decir, cercana a su cotidianidad y desprovista de misterio. Además, propició la participación de gente que se animó a colaborar con el proceso.




Para finalizar, quiero despedirme haciéndole llegar a Magaly Chávez y Rodolfo Rico mis más sinceros agradecimientos por permitir a los demás artistas y a mí acercarse a la comunidad que presenció nuestras acciones, y a los vecinos y demás asistentes, también, muchas gracias. Pronto les ofreceré más comentarios de otras acciones realizadas últimamente.

domingo, 15 de marzo de 2009

Marabino y "marasefue".

Contar lo que hice en Maracaibo es un reto, en verdad. Decir que todo lo que pasaba por el frente se convertía en excusa para el arte quizás sea la mejor manera de resumirlo.

Ante todo, quiero agradecer a todos los panas que me permitieron formar parte de sus colectivos, con las cuales llevamos las diversas propuestas que se manifestaron en las calles de la ciudad más importante del occidente de nuestro país. Me siento orgulloso de haber trabajado con el colectivo Silenciadores y con La Evidencia de lo Inusual. Les contaré un poco sobre algunos de los proyectos, a manera de abreboca, con la posibilidad de ampliar la información en futuras entradas del Nido. Empecemos con el proyecto Objetos del Hogar, presentado en la Velada de Santa Lucía por La Evidencia de lo Inusual:

Objetos del Hogar:

Este proyecto superó mis espectativas. Así de simple. La integración del señor Enrique a la actividad, su entusiasmo e iniciativa fueron la causa principal del éxito de esta actividad. Encontramos el hogar del "Profe" como un recinto lleno de cierta cualidad mística que residía en los objetos, cuyo sometimiento al uso y a condiciones específicas del entorno les dotaron de personalidad e historia. Creo que lo más importante de éste proyecto radica en la relación íntima que se estableció entre el sitio específico y la relación artísta, dotando así a la cotidianidad del hogar con el aura mítica que rodea al arte, pero al mismo tiempo, alejándo este concepto del aislamiento del "recinto sagrado" que el lugar común ha hecho del taller del artista. Si quieren algo más de información, visiten el blog de La Evidencia de lo Inusual o soliciten información al correo laevidenciadeloinusual@gmail.com






Fotografías: (De arriba a abajo) HRoja, Carlos German Rojas, Érika Ordosgoitti.

El Chinchorro del Pueblo:

Cuando nuestro amigo "podri", Abhner Leal, se acercó al colectivo Silenciadores (con el que he estado trabajando esporádicamente), a contarnos de la idea de trabajar en la Velada de Santa Lucía con una hamaca, no resistimos unirnos la iniciativa. Ese día, nos reunimos y entre todos armamos un concepto que tuviera que ver con el espíritu de la Velada, además de decidir usar el término "chinchorro", que nos parecía más cercano al venezolano, que el otro, "hamaca", de uso más generalizado. Para los que no saben, "el Chinchorro del pueblo" consistió en recolectar ropa de los habitantes del vecindario para construir un chichorro a gran escala. Esto resultó en la integración de los vecinos del barrio a la construcción de la obra: un aporte individual para una creación colectiva. Les dejo a ustedes especular con respecto al discurso del objeto. ¡Vean las fotografías!






Fotografías: Carlos German Rojas.

Mural "Silenciador":

Hablar de esto es mucho más sencillo: Hicimos un mural en casa del señor Antonio, un señor súper pana que ya le había cedido a Abhner su máquina de coser para la realización de la hamaca. Cabe acotar que es primera vez que realizo un mural con los Silenciadores en plena calle (quizás algunas prácticas anteriormente, pero nada serio), y espero que no sea la última. Aquí los registros:

Fotografías: Carlos German Rojas.

Definitivamente, mi primera visita a Maracaibo fue algo inigualable. Un hito en mi carrera. Así lo veo. Tengo altas espectativas para la próxima Velada. Hasta pronto.



"Ladrón de Interiores". Fotografía de Carlos German Rojas

miércoles, 4 de marzo de 2009

Zulia.


Aprovecho que acabo de desayunar con patacón para sentarme a escribir aquí algunas impresiones sobre "la tierra del sol amada". La primera: Desde que llegué a Maracaibo no ha hecho tanto calor, pero me dicen que es por la época. La segunda: los monumentos públicos están muy bien cuidados. Las plazas y parques, que abundan, relucen por su buena condición, ofreciéndose gentilmente al usuario y al visitante. Tercera: la comida es sabrosa y chorrea grasa. Bueno para una semana, malo para una vida. Y cuarta: Atienden excelente en instituciones y negocios. Bravo por Maracaibo y su gente!







El trabajo con La Evidencia de lo Inusual marcha como locomotora, y eso no sería así si no fuera por la lucidez y la simpatía del señor Enrique Urdaneta, mejor conocido por la comunidad como "el Profe Cantante". Hemos hecho lo posible para acoplarnos a su vida lo más posible al mismo tiempo que nos hacemos aportes mutuos.


El Profe Enrique Urdaneta.


Al mismo tiempo, paseo de casa en casa junto a mis amigos del colectivo "Silenciadores" recogiendo la ropa para la confección del Chinchorro, de lo que se encargará nuestro compañero y fiel amigo "podri": Abhner Leal. Más adelante les daré información detallada de todas las actividades realizadas individualmente y en colectivo durante ésta visita a Maracaibo. Mientras tanto, pueden complementar la información visitando el blog de La Evidencia de lo Inusual o el de la Velada de Santa Lucía. Nos vemos en Caracas.


Fotografías: Arriba: CASA. Centro y abajo: Javier "Sardina" Peñaloza.